AUTOR: Dra. Vassallo, María Laura.
Alumna primer año de la carrera de especialista en dermatología de la Asociación Argentina de Dermatología
DEFINICION
Es el tumor benigno de la piel más frecuente en adultos mayores; también es común en personas de mediana edad e incluso puede aparecer en la adolescencia.
SINTOMAS
Generalmente son múltiples y suelen localizarse en la cara, el tronco (pecho, hombros, espalda), o las extremidades (excepto palmas o plantas).
Inicialmente son “crecimientos” redondeados u ovalados, bien delimitados, menores a 1cm, cerosos, color tostado claro o amarronados, algo elevados, de consistencia blanda, y desintegrables al contacto. Con el tiempo, aumentan de tamaño, comienzan a engrosarse y semejan verrugas, tornándose más oscuros o negros.
Si estos tumores se someten a traumatismo, sobre todo en zonas de roce, se encuentran costras e inflamación de la base y pueden “picar” o “doler”.
CAUSA
Su causa es desconocida y en su origen se han implicado varios factores como exposición solar, factores genéticos, o infección viral.
DIAGNOSTICO
El médico normalmente hace el diagnóstico inspeccionando el tumor. Podría recomendar extraer el tejido para examinarlo con el microscopio, a través de una biopsia de piel.
TRATAMIENTO
Habitualmente el tratamiento no es necesario. Lesiones que se irritan o molestan, debido por ej. Al roce con la ropa, o indeseables desde el punto de vista estético, pueden requerir su extirpación. Existen para ello distintos métodos que incluyen: raspado (dermoabrasión), destrucción por frío (crioterapia), desecación eléctrica (electrocauterización), ablación con láser, o escisión quirúrgica. Pueden recidivar y no es infrecuente que se requieran múltiples tratamientos para garantizar su destrucción completa.
PREGUNTAS FRECUENTES
1. ¿Por qué se produce? ¿Es hereditaria?
Su causa aún no se conoce con certeza. Suele tener tendencia hereditaria y frecuentemente existen antecedentes familiares de este trastorno.
2. ¿Son crecimientos “malignos”?
No, no son tumores cancerosos.
3. ¿Pueden ser provocados por la exposición al sol?
Podría estar relacionado a la exposición solar, aunque hay discusión al respecto.
4. ¿Es contagioso?
No, la queratosis seborreica no es contagiosa.
5. ¿Se deben operar?
No, no necesita tratamiento; sólo ciertas lesiones en determinadas oportunidades pueden requerir ser extraídas.
6. ¿Y pueden volver a aparecer luego de extraerlos?
Generalmente no vuelven a aparecer después de haber sido extirpados. Podrían aparecer más lesiones en el futuro si la persona es propensa a esta afección.